La patrulla de vigilancia ambiental del Colectivo Azálvaro descubrió hace unos días los restos de nueve buitres en la línea eléctrica que abastece de energía al municipio de Urraca Miguel, ocho de buitre leonado y uno de buitre negro.
Muchas aves se sienten atraídas por el centro de tratamiento de residuos Ávila-Norte, situado en Urraca-Miguel, y se desplazan hasta allí. En los vuelos de aproximación al vertedero controlado estos animales se sirven de las corrientes de ladera para su desplazamiento y en un punto coinciden con el tendido de suministro eléctrico del municipio y el CTR, por lo que causa gran mortandad.