Arévalo ha celebrado este pasado fin de semana la festividad de Nuestra Señora Virgen del Camino, conocida popularmente como La Caminanta. A lo largo del fin de semana se han llevado a cabo diversos actos entre los que destacan la procesión del sábado, en la que se trasladó a la Virgen desde su capilla, a las afueras del pueblo, hasta la iglesia de San Juan, y la procesión del domingo cuando se devolvió la imagen a su resguardo habitual.
En la jornada del domingo la fiesta comenzó al mediodía con la celebración de la misa solemne en la iglesia de San Juan, que contó con la presencia de la nueva corporación municipal. La fiesta continuó por la tarde con la actuación de la Escuela de Folclore de Arévalo, y una parrillada posteriormente en la que se vendieron más de 500 bocadillos, de chorizo, pancet o lomo.
Fran Ramos, es ermitaño de la Virgen, y recordaba las actividades del lunes, día que comenzó con una misa en memoria de los cofrades difuntos. Al mediodía los cofrades celebraron una comida de hermandad, mientras que previamente algunos de ellos visitaron los colegios La Moraña, Amor de Dios y Los Arevacos donde repartieron 28 kilos de caramelos.
La tarde se pasó de nuevo en el entorno de la Ermita donde se organizaron juegos infantiles, con regalos, a cargo de la asociación La Queda. La fiesta finalizó con bailes en el entorno y con la Salve.