Renfe ha anunciado 13 millones de euros de inversión para contratar servicios de atención remota en 134 estaciones de toda España, dieciséis de ellas en Castilla y León, y una de ellas será la de Arévalo. En nuestra región también se instalarán en Aguilar de Campoo, Almazán-Villa, Astorga, Boñar, Briviesca, Cistierna, Guardo, La Vecilla, Matallana, Osorno, Peñaranda de Bracamonte, Puebla de Sanabria, Sahagún, San Feliz y Viana de Cega.
Además de la instalación en 134 estaciones, la empresa ferroviaria podrá solicitar al adjudicatario otros 20 terminales cuya ubicación está por definir. El objeto del contrato es la prestación de un servicio personalizado de atención, información y venta remota al cliente. De este modo, Renfe quiere seguir invirtiendo en equipos para mejorar la comunicación con los viajeros.
La empresa adjudicataria tendrá que proporcionar los equipos terminales, su instalación, así como el personal del ‘contact center’ para la atención remota de los viajeros. La adjudicataria se comprometerá a instalar los equipos ARES según las funcionalidades requeridas y al mantenimiento integral de los mismos, incluyendo los costes derivados de vandalismos o mal uso de las instalaciones. Igualmente, dotará de redes de comunicaciones y del soporte informático necesario para el funcionamiento del sistema, tanto en estaciones como en el ‘contact center’. El plazo de duración inicial del contrato será de 5 años, a contar desde el 1 de octubre de este año. No obstante, podrá ser prorrogado a instancia de Renfe por periodos sucesivos de hasta un máximo de tres años adicionales.