La Guardia Civil ha desmantelado una organización criminal compuesta por diecisiete personas y han investigado a dos más por su presunta implicación en una treintena de robos perpetrados en Arévalo, Zamora, Madrid, Burgos, Toledo, Valencia y Cuenca.
En concreto los detenidos cometieron, el pasado mes de marzo, un robo en un establecimiento de telefonía de Arévalo. Los integrantes de este grupo tomaban exhaustivas medidas de seguridad, puesto que en el momento de su detención estaban asentados en barrios de la periferia de Madrid y en la provincia de Toledo. No obstante, cambiaban de vivienda y de vehículo con asiduidad para evitar ser detectados.
Asimismo, esta organización se trasladaba hasta las diferentes localidades donde realizaban un estudio detallado del lugar donde perpetrarían el robo. Entre los integrantes del grupo destaca la presencia de varias personas con gran destreza en la apertura de cajas fuertes, y en el uso de lanza térmica, así como en la manipulación de los sistemas de seguridad.
Los diecisiete detenidos, con edades comprendidas entre los 20 y los 30 años, suman más de 100 antecedentes.