Este fin de semana se han celebrado las fiestas de Madrigal de las Altas Torres en honor al Cristo de las Injurias. Los encierros y eventos taurinos se desarrollaron sin problemas, solo con algún pequeño susto, algún que otro revolcón sin mayores consecuencias. Este año los toros elegidos para los encierros no dieron excesivo juego lo que provocó la insatisfacción de algunos aficionados.
La alcaldesa de Madrigal de las Altas Torres, Ana Zurdo, ha indicado que este tipo de festejos son muy caros y que “no es lo mismo que lleven a cabo este tipo de actividades las asociaciones, que se pueden gastar 4.000 euros en un toro, en un evento, que lo haga una administración pública, que no se puede permitir eso". Y recuerda que Madrigal "es un municipios con más de 200 parados y tiene que estirar el presupuesto para que llegue a final de año”.
Explica que hay pueblos en los que se ha reducido o eliminado este tipo de festejos, mientras que Madrigal los mantiene porque hay mucha tradición. Indica que “Madrigal es muy taurino y quiere toros, mañana, tarde y noche, algunos dicen que los toros no son bravos, pero es que no somos Las Ventas, son buenísimos toros, según los expertos y los veterinarios que han estado presentes en los festejos”.
En general la alcaldesa hace un balance positivo de estas fiestas en honor al Cristo de las Injurias, porque no se han producido incidentes durante los festejos ni cogidas destacables.
Uno de los platos fuertes de este fin de semana festivo de Madrigal fue la actuación musical del sábado, compuesta por la macrodiscoteca Alefran y Javi Lin y su violín, participante en el concurso Got Talent, que despertaron el interés y la curiosidad de los madrigaleños que llenaron la plaza de San Nicolás.
