Los agentes de la Policía Local de Arévalo utilizarán una aplicación que permite agilizar la tramitación de todo tipo de incidencias y la movilización de los servicios de emergencias. De esta forma, el programa ‘Irpol’ desarrollado por la empresa Iranon conecta a los Agentes de Policía con la Dirección General de Tráfico, el consistorio o el 112 para notificar, resolver y actualizar en tiempo real los incidentes que ocurren en la ciudad de Arévalo. Esta app es capaz de recoger o recibir información; además de almacenar todo tipo de formularios, actas y partes que requieran los agentes para comunicar que existe un socavón en una vía, que se ha vulnerado la ordenanza de parques, la de ruidos o la de convivencia, entre otros. “La app permite la independencia de los Policías, los cuales pueden realizar los informes sobre cualquier incidencia in-situ adjuntando las fotos necesarias para trasladar al servicio público que se encargará de su gestión y subsanación, dejar constancia de los controles de forma digital y un gran abanico de procedimientos”, indica el Oficial de Policía Ángel Tejedor.
El servicio ha estado en prueba durante dos meses. En los primeros días, los agentes de Policía Local recibieron una formación cualificada para la utilización de la aplicación y de los dispositivos PDA’s e impresoras térmicas. Una vez pasado el periodo de prueba y tras los resultados obtenidos, se ha comenzado a utilizar de forma definitiva.
“Este nuevo sistema de trabajo nos permitirá ser más ágiles, mejorar el servicio que prestamos a los vecinos y estar más tiempo en la calle cerca de nuestra comunidad para atender a sus demandas diarias”, indica el Subinspector Mario gallego.
Según la Policía Local de Arévalo, el programa permite agilidad, rapidez, facilidad, conectividad en la calle, recepción y envío de avisos. Además, con la incorporación de esta nueva herramienta digital, la Policía Local reduce la utilización del papel, cumpliendo así con el compromiso de la Administración electrónica impuesta por la Ley 39/2015, y convirtiéndose en la primera Policía Local de un municipio de menos de 20.000 habitantes totalmente digitalizada de Castilla y León.