Es, sin duda, otro de los titulares que deja esta jornada de resaca tras los comicios celebrados en la jornada del 28 de mayo. Los buenos resultados del Partido Popular se traducen en un nuevo diputado en la institución provincial, donde volverá a contar con 13 escaños. Y es que durante los últimos 4 años esta formación ha gobernado gracias al apoyo que le brindó el actual vicepresidente en funciones y edil de El Tiemblo en idéntica situación en estos días, Pedro Cabrero (Grupo Ciudadanos).
En estas elecciones, además de votarse a los 1.272 concejales, por ende, se termina eligiendo a los 25 representantes en la Diputación, procedentes de los cuatro partidos judiciales en los que está dividida la provincia, Ávila Arévalo, Arenas de San Pedro y Piedrahíta. Así, el nuevo Pleno quedará formado por 13 del PP, 6 del PSOE (dos menos que en la última cita electoral), 5 de Por Ávila (uno más que en 2019) y 1 de VOX, que pasa a formar parte de esta institución gracias a los resultados cosechados en el Ayuntamiento de la capital. Nuestra tierra, la formación creada por exdiputados del PSOE, entre los que se encuentran Pedro José Muñoz y Roberto Aparicio, no obtiene el apoyo suficiente para entrar en la Diputación.
El Partido Popular ha logrado 798 de esos 1.272 ediles, creciendo en 18 con respecto a las elecciones de hace cuatro años. Mientras, el PSOE ha perdido 82, quedándose en 226. La tercera fuerza en la provincia es Por Ávila, con 141 representantes en los ayuntamientos. Por otro lado, Nuestra Tierra alcanza los 37; VOX, consigue 26 y Ciudadanos desaparece del espectro político de Ávila.