Desde que el pasado 14 de marzo se decretase el estado de alarma en nuestro país, el mensaje es claro: quédate en casa. En Radio Adaja hemos querido conocer el testimonio de varias personas y familias que pasan estos días de cuarentena en sus furgonetas, ya que son precisamente sus casas.
Los días previos a que se decretase el estado de alarma, Eric y Maribel se encontraban por la zona de Jaén y Castilla la Mancha y decidieron regresar a su ciudad natal, Lleida. “Estamos en el pueblo de Borges Blanques, a 20 kilómetros de Lleida, en el cual hay un área de autocaravanas a las afueras del pueblo”, comentó Eric. Allí cuentan con los servicios necesarios. Al estar confinados se pasan la mayor parte del tiempo dentro de la furgoneta. “A ratos leemos, nos hemos hecho un parchís, un juego de damas, un juego de la oca y también vemos series o películas. Se te hace un poco más agobiante porque el sitio es muy reducido”, resaltó Maribel.
“La Guardia Civil o los Mossos nos dicen que nos vayamos a casa pero es que ya estamos en ella, porque es nuestra furgoneta en este caso, y sí que nos recomiendan muchas veces ir a casa de algún familiar. Yo no sé si tengo el virus o no, entonces te da miedo ir a casa de un familiar y que tú puedas tener el virus aunque no tengas síntomas, y a ver si le voy a pegar algo a otra persona”, apuntó Eric.
Por su parte, Daniela y Fernando están en su furgoneta con su hija de quince meses, Bianca, y su perrita, Maya. Ellos ahora mismo se encuentran en un terreno que les ha prestado una familia en Meira. “En cuanto a hacer compras, yo me quedo en el patio con la niña mientras Fernando se va con la furgo a hacer la compra una vez a la semana, una compra grande y esa es la logística que hemos ido llevando”, explicó Daniela. También han hecho pequeñas reparaciones que le hacían falta a la furgoneta, mientras distraen como pueden a Bianca.
José Reven permanece en Bilbao, viviendo en su furgoneta, ya que considera que no sería responsable por su parte irse a casa de algún familiar o amigo. “He decidido pasar la cuarentena aquí en la furgo, entonces los días en los que tengo que trabajar porque hay servicios mínimos, pues el mínimo contacto posible, y yo aquí en la furgo no pongo en riesgo a nadie, creo que es una forma muy responsable”, resaltó.