La sede de la Delegación Territorial en el Monasterio de Santa Ana acoge desde la tarde de ayer miércoles 17 de noviembre un encierro de veterinarios temporales. El Sindicato de Veterinarios de Ávila (USCAL) denuncia que la Consejería de Presidencia se niega a detener la ejecución de las Ofertas Públicas de Empleo de 2017 y 2018.
“Debería aprovechar la legalidad vigente y detener los procesos selectivos hasta que el Congreso de los Diputados concluya la tramitación del proyecto de ley de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público”, apuntan.
Según este sindicato, tanto el PP como Ciudadanos han presentado enmiendas al proyecto de ley de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público. Por ello piden que “sean consecuentes en Castilla y León al respecto”, ya que “se niega a reconocer el carácter sanitario de veterinarios y farmacéuticos”.
Catalino Casillas, del Sindicato de Veterinarios de Ávila (USCAL), ha explicado que los sanitarios no asistenciales, farmacéuticos y veterinarios, piden que se les permita acceder al empleo público como marca la Ley 10/2010 de salud pública y seguridad alimentaria de Castilla y león, que en su artículo 5.6 obliga a la administración a que “se utilice con carácter general el sistema de concurso oposición, en términos similares al utilizado por el SACyL”. En el caso de los veterinarios, desde 2006 han ofertado 10 en ese año y 32 en 2007, cuando actualmente hay más de 350 interinos.
Al respecto, recuerdan que piden que “se cumpla la Ley, en atención a la situación absolutamente excepcional de la temporalidad en el sector público de Castilla y León y en toda España”, con el objetivo de “evitar el cese de cientos de miles de empleados públicos temporales -más de un 70% de mujeres mayores de 50 años- que han sido condenados y mantenidos en esta situación de temporalidad abusiva y excesiva durante décadas por la falta de ofertas de empleo en número suficiente”.