Había bebido alcohol antes de ponerse al volante, iba a más velocidad de lo permitido, conducía con cascos e iba realizando desplazamientos laterales con su furgoneta por la A-6, a la altura de Adanero, sin señalizar los movimientos con los indicadores.
Los agentes de la Guardia Civil de Ávila se dieron cuenta de que un hombre conducía una furgoneta de forma peligrosa y le pararon en un lugar seguro de la A-6, kilómetro 111. Entonces comprobaron que llevaba puesto unos auriculares. Le realizaron la prueba de detección alcohólica y dio un resultado positivo en las dos mediciones realizadas.
Los agentes le sancionaron administrativamente por circular con una tasa de alcohol superior a lo establecido, que es de 0,25 miligramos por litro, ya que el hombre arrojó 0,64 en la primera medición y 0,61 en la segunda. La sanción también es por conducción negligente al haber creado una situación de riesgo o peligro y por conducir con los cascos puestos.
Se le inmovilizó el vehículo y se le instruyeron diligencias policiales en calidad de investigado por un supuesto delito contra la seguridad vial, que han sido remitidas al Juzgado de Instrucción número uno de Arévalo.