La Guardia Civil ha detenido a nueve integrantes de un grupo criminal que había cometido 27 delitos en 14 provincias, entre ellas Ávila. Robaron alimentos, material eléctrico y cobre en naves de polígonos industriales por valor de 50.000 euros. La banda cometía los delitos en un intervalo muy corto de tiempo en lugares muy distantes, para lo que recorrían en un fin de semana hasta 3.500 kilómetros.
Los nueve detenidos en el marco de la operación Kaese tienen edades comprendidas entre los 20 y los 60 años y se les acusa de pertenecer a un grupo criminal perfectamente organizado, que planificaba sus acciones de forma metódica y que estaba unido por lazos familiares. Estudiaban previamente la zona donde iban a cometer el delito, lo preparaban de forma minuciosa y cada componente tenía asignado el papel que tenía que desarrollar.
Los detenidos estaban especializados en robos en naves de polígonos industriales de productos alimenticios y material de comunicaciones, de gran valor económico y con una rápida salida en el mercado ilegal. De hecho, las investigaciones comenzaron tras el robo de casi 4.000 quesos en Numancia de la Sagra, Toledo.
Las primeras cinco detenciones se efectuaron en la localidad madrileña de Collado Villalba, cuando regresaban de cometer un robo en la provincia de Ávila. Al día siguiente fueron detenidos los cuatro restantes en Móstoles, para lo que se contó con la colaboración de la Policía Local de este municipio.
