Si el martes fue Pajares de Adaja el municipio que sufrió una gran granizada, ayer miércoles fue Crespos la localidad que registró una tormenta que hizo que se recogieran 30 litros por metro cuadrado en 15 minutos.
Jesús Hernández, alcalde de Crespos, lamenta "los efectos que pueda tener en la cosecha que ya estaba totalmente granada y preparada para ser recogida". Los arbustos y los árboles también notaban las sacudidas de la tormenta y los huertos familiares de la zona también sufrieron con el exceso de agua y el granizo que cayó durante un cuarto de hora.
Las arquetas de la red de abastecimiento no lograban absorber todo el agua que caía y los canalones también se vieron desbordados. Algunos tejados sufrieron daños.