Se siguen registrando ataques de lobos en nuestra provincia.
Una de las últimas apariciones de los cánidos tuvo lugar en un paraje ubicado entre Ávila capital y la ermita de Sonsoles esta semana, según explican desde UCCL, y en él murió un ternero de una semana. El ganadero afectado suma una decena de terneros muertos por esta causa y aún no ha cobrado ninguna indemnización, según explican desde el sindicato.
El segundo ataque de esta semana fue en Navalperal de Pinares y en él murieron otros cuatro terneros de dos explotaciones. Uno de estos ganaderos sufrió un primer ataque en 2013 y aún no ha recibido indemnización alguna.
Desde UCCL aseguran que el número de ataques está creciendo tanto que desde la administración regional se está formando a varios guardias medioambientales y celadores para que puedan a acudir a certificar estos ataques.