Un centenar de remolacheros abulenses se ha desplazado esta mañana a Valladolid para entregar carbón en la Delegación del Gobierno de Castilla y León. Carbón que va destinado al ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, por el nuevo impuesto a las bebidas azucaradas.
Esta medida repercutirá negativamente en los cultivadores de la región, según explicaba esta mañana Joaquín Pino, responsable de Asaja Ávila.
Para el sindicato agrario, “no es creíble la coartada de que lo hacen para proteger nuestra salud, porque esta decisión viene con el sello exclusivo de Cristóbal Montoro y su objetivo no es otro que recaudatorio”.
También aprovechan la jornada para llamar la atención de las administraciones ante los problemas que tienen los agricultores y ganaderos de la región, como son las enfermedades que trasmite la fauna salvaje y los destrozos que causan los lobos a las ganaderías de extensivo.